Nueva polémica sobre los lugares bíblicos.

Falsificando la Historia

Hace algo menos de un mes, la UNESCO tomó una controvertida y absurda resolución por la que declara que la conocida tumba de la matriarca Raquel, en Belén, y la tumba de Los Patriarcas ( Majpelá ) en Hebrón, sean reconocidas como herencia histórica del Islam.

^{(Por Natalio Steiner en elreloj.com)}

Esta decisión provocativa y política desconoce la historia judía en su totalidad y justamente se tomó en vísperas de la lectura de la porción bíblica correspondiente a Jaie Sara, cuando Abraham compra  lo que luego sería el primer cementerio hebreo en Israel por lo menos 2300 años antes que los árabes conquistaran el país e islamizaran por la fuerza a parte de la población y fundaran mezquitas en lugares sagrados para judíos y cristianos.

Una decisión así se opone no solo a la tradición religiosa sino a la historia y a la verdad y tras ella hay consideraciones políticas destinadas a continuar deslegitimando la existencia de Israel en la región.

¿No implica ningún derecho para los judíos que las tumbas de sus patriarcas fundacionales sean lugares sagrados que conformaron una identidad milenaria ? ¿ Acaso nadie parece preguntarse en la UNESCO con que derecho se fundaron mezquitas en lugares sagrados para los judíos ? Ya existe el marcado antecedente de ocultar la presencia judía en el Monte del Templo en Jerusalén donde se erigieron en su momento dos mezquitas que hoy conforman el tercer lugar sagrado para el Islam desconociendo que por cientos de años estuvieron allí los dos grandes templos judíos destruídos por los babilonios y romanos respectivamente.

No son inventos judíos. Es historia comprobada con hallazgos arqueológicos desde la época del rey David.

Jerusalén aparece en la Biblia Hebrea cerca de 700 oportunidades mientras que en el Corán aparece citada en una sola oportunidad . Judíos a lo largo de muchas generaciones, y actualmente, rezan mirando a la Ciudad Santa allí donde se encuentren y cualquiera sea la línea religiosa que profesen mientras que los árabes musulmanes lo hacen mirando a la Meca .

No alcanza con intentar borronear la presencia judía sobre Jerusalén que ya se avanza sobre Hebrón ( primer capital del Rey David ) donde los judíos vivieron siempre hasta ser expulsados en 1929 por los árabes pudiendo recién regresar en 1967. A esto hay que sumar ahora la tumba de Raquel que no ha tenido significación alguna para el pensamiento islámico.

Si bien esta disputa territorial, como judíos de la diáspora, nos parece algo lejano, inocuo, a la larga afectará directamente la vinculación judía con la tierra de Israel donde se asienta el estado hebreo.

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