La Biblia desde el siglo XXI

El "bendito" hallazgo de "la tablilla de maldición"

13.04.2022 00:00

Vuelvo a retrasar el post que me queda sobre la conquista de Jericó para comentar el ultimo descubrimiento arqueológico que ha circulado por los medios de difusión durante las últimas semanas

Se trata de una chapa de plomo con texto datado en coincidencia con las fechas en que los israelitas ocuparon Canaán. 

Quiero destacar tres aspectos que inciden en la historicidad de los relatos bíblicos tras la ocupación de la Tierra Prometida por parte de los israelitas.

 

Sobre el descubrimiento

El Dr. Scott Stripling, de la Associates for Biblical Research ha presentado recientemente lo que considera que puede ser el descubrimiento más importante de los últimos años. Se trata de una especie de chapita de plomo de unos 4 centímetros cuadrados escrita en hebreo prot alfabético.

Fue desenterrada en monte Ebal durante unas excavaciones realizadas entre 1982 y 1989 por el ya difunto profesor Adam Zertal, de la Universidad de Haifa. Durante aquellas excavaciones los colaboradores del profesor Zertal no se percataron de la chapita, y ésta acabó en un montón de escombros ignorada por los expertos hasta 2019. A fines de ese año, el profesor Scott Stripling y su equipo se dedicaron a cribar el material desechado en las excavaciones de los años ochenta. Y esta vez sí llamó la atención un extraño objeto, del que no sabían más que sus escasas dimensiones, que era de plomo y que estaba plegado:

En esas condiciones no era factible leer la chapita, ya que su fragilidad imposibilitaba su desplegado; por lo que contactaron con la Academia de Ciencias de la República Checa, en Praga. Allí trataron el objeto como si fuese un “paciente” y le realizaron tomografías para poder visualizar el interior. La tomografía permitió leer una antigua inscripción en hebreo hebrea protoalfabético de 40 signos.

Los expertos en textos antiguos, Pieter Gert van der Veen de la Johannes Gutenberg-Univer sität Mainz y Gershon Galil de la Universidad de Haifa, aclararon que se trataba de una “defixio” (tablilla de maldición). Esta es la traducción: “Maldito, maldito, maldito - maldito por el Dios YHW. Morirás maldito. Maldito ciertamente morirás. Maldito por YHWH - maldito, maldito, maldito”.

 

Sobre la datación

En base a los análisis epigráficos, al análisis del plomo y a la zona donde en su día se encontró, se ha estimado que la chapita es posterior a la llegada de los israelitas a Canaán, pero no mucho mas tarde de esas fechas.

Lo que yo no tengo claro es si la fecha anunciada por el Dr. Scott Stripling es 1400 o 1200 antes de Cristo. Y es que en jpost.com (The Jerusalem Post) leo:

" “Creo que el amuleto data de la Edad del Bronce Final II, o del año 1400 a. C.”, dijo Stripling a The Jerusalem Post"

En cambio, en timesofisrael.com informan esto otro:

"Según el análisis epigráfico de los escaneos y el análisis de plomo del artefacto, Stripling y su equipo datan la tablilla de maldición (o defixio) a finales de la Edad del Bronce, antes o alrededor del 1200 a. C.".

Supongo que se trata de un error en el jpost.com y que Stripling se refería al 1200 antes de Cristo. En cualquier caso, está claro que la chapita fue escrita no mucho después de la llegada de los israelitas a Canaán (según la cronología que venimos considerando en la serie sobre la historicidad del Éxodo).

 

Lo destacable del descubrimiento
 

Confirmación de la historicidad del mandato que recibió Moisés en Deuteronomio 11:29

Y no sólo del mandato. También de la obediencia que los israelitas de aquel entonces hicieron al mandato.

Copio el versículo:

Y cuando Jehová tu Dios te haya introducido en la tierra a la cual vas para tomarla, pondrás la bendición sobre el monte Gerizim, y la maldición sobre el monte Ebal” (Deuteronomio 11:29).

  • Ya hemos visto más arriba que los expertos han informado que la chapita es una tablilla de maldición (defixio).
  • También hemos visto que fue encontrada durante las excavaciones del profesor Adam Zertal en el monte Ebal.
  • También acabamos de ver que está datada no mucho después de que los israelitas entrasen en Canaán.

Así, pues, “blanco y en botella”. Esta chapita supone un abal para la historicidad, tanto del pasaje que consigna el mandato, como del hecho de que los israelitas lo cumplían cabalmente cuando entraron en la tierra prometida. Posiblemente la chapita era lo que el Gershon Galil explicó a “The Times of Israel”: “El texto mayoritario en idioma hebreo, postuló [Galil], fue escrito por israelitas como un documento legal interno, una forma de contrato social, advirtiendo a la persona contratada lo que sucedería si no cumplía con sus obligaciones”.

 

Reubicación cronológica del uso escrito del nombre de Yahveh (Jehová)

Hasta ahora se consideraba que la primera referencia a Yahveh estaba en la estela de Mesa, del siglo IX antes de Cristo. Y no era un texto precisamente escrito por israelitas.

Esta chapita retrasa unos 5 siglos la utilización del nombre de Yahveh, y ciertamente por parte de sus adoradores, los israelitas. Y, además, en cumplimiento de un mandato dado por el mismo Yahveh a Moisés.

 

Confirmación de que los israelitas conocían la escritura cuando llegaron a Canaán

Tiene razón Galil cuando dice que esta chapita zanja la discusión sobre si los israelitas sabían leer y escribir. Declara para “The Times of Israel” : “Sabemos que desde el momento en que llegaron a Israel, los israelitas sabían escribir, incluso el nombre de Dios, claramente”. Y “No es demasiado sorprendente; la gente ya sabía escribir en otros lugares”.

De la sólo lectura de la Biblia se deduce claramente que los israelitas conocían la escritura. Al menos Moisés, educado en la corte egipcia, debía estar familiarizado con los textos egipcios.

Si los israelitas como pueblo (no me refiero a cada uno de los israelitas) no hubiesen conocido la escritura, difícilmente se podrían entender pasajes como estos:

Éxodo 24:7  “Y tomó el libro del pacto y lo leyó a oídos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las cosas que Jehová ha dicho, y obedeceremos”.

Éxodo 24:12  “Entonces Jehová dijo a Moisés: Sube a mí al monte, y espera allá, y te daré tablas de piedra, y la ley, y mandamientos que he escrito para enseñarles.

Deuteronomio 11:18 “Por tanto, pondréis estas mis palabras en vuestro corazón y en vuestra alma, y las ataréis como señal en vuestra mano, y serán por frontales entre vuestros ojos. (Esto hace referencia a las filacterias que aun hoy usan los judíos ortodoxos. Evidentemente, contenían escritos)

Josué 8:32  “También escribió allí sobre las piedras una copia de la ley de Moisés, la cual escribió delante de los hijos de Israel”.

Y muchos otros que hacen referencia la Ley (“Esta es la ley …) ¿A qué podía hacer referencia sino a un texto escrito?

Sólo un trozo de las tablas de la ley que apareciese en alguna excavación podría confirmarnos que realmente Moisés recibió un texto escrito en el monte Sinaí y que ya por aquellas fechas el pueblo de Israel sabía leer y escribir. Mientras tanto, conformémonos con esta pequeña chapita que confirma el conocimiento de la escritura por parte de los Israelitas no muchos años después de que Moisés recibiese la ley de Dios.

 

Enlace a los artículos en jpost.com y en  timesofisrael.com.

 

Contacto

BíblicaMente.org

informacion@biblicamente.org

Sitio de búsqueda

Etiquetas FAVORITAS

Historicidad de la Biblia

Ateísmo

Si deseas comentar alguna página, pincha aquí e indícamelo en el mensaje.
Abriré ventana de comentarios para que opines libremente.
Te avisaré cuando esté disponible.

ESTADÍSTICAS WEBNODE
(Desde Nov/08)

7.810.110 Páginas visitadas
2.067.452 Total visitas
≈620.235 Visitantes únicos

 

El 03/12/2022 biblicamente.org recibió notificación de calificación como “sitio web de alto impacto”:

Puede consultar los criterios de selección que utiliza Gitnux para realizar la calificación en el siguiente enlace:

Gitnux: Crieterios de selección.

 

Un versículo para hoy

 


 

¡Ayúda a promocionar este sitio!
(Sin dar dinero)

(CC) Contenidos utilizables sin fines comerciales. Se agradece enlace a originales.

Creado con Webnode